Ya estamos casi en verano y aprovechamos para salir y tomar algo a las terrazas de los bares y cafeterías. Tanto si es por la tarde como si es por la mañana, en la época de verano y en tierras valencianas, es muy común ver en las mesas vasos de horchata con un dulce esponjoso y alargado con azúcar glaseado.
Pero ¿conocéis a este dulce típico del municipio valenciano de Alboraya? Son los fartons.
Vamos a conocer cuál es su origen, sus ingredientes, las formas de elaboración y os daremos unas recomendaciones para su consumo en estas vacaciones.
Origen y consumo contextual de los fartons
El origende este alimento procede de la familia Polo, la cual elaboró un bollo especial, alargado, dulce y tierno, esponjoso y perfecto para absorber la horchata sin problemas.
De esta manera, los horchateros de Alboraya trataron de encontrar el dulce perfecto que acompañara a esta bebida valenciana.
Más tarde, la misma familia Polo amplió su gama de productos y comenzó a elaborarlos hojaldrados. Aunque los ingredientes de estos últimos, como veremos, son más insanos.
La hostelería, por su lado, y otras marcas comenzaron a servir bollería congelada y con ella la modalidad de los fartons, el “hojaldrado”, elaborado con una masa diferente, lo que le da otra textura.
Tradicionalmente, los fartons acompaña a la horchata. Pero para los que no son amantes de esta bebida vegetal elaborado con chufa, los fartons pueden tomarse solos o acompañados de otra bebida.
Ingredientes y formas de elaboración
Los fartons tradicionales están elaborados con ingredientes básicos como son la harina, la leche, el azúcar, el aceite (principalmente aceite de girasol), la levadura y los huevos. Dados los ingredientes que tienen, uno de sus principales nutrientes son los hidratos de carbono en forma de azúcares simples.
En el caso de los fartons hojaldrados, además de los ingredientes que se emplean para los fartons tradicionales, les añaden más azúcares en forma de jarabe y grasas menos saludables como la manteca de cerdo y la grasa de palma.
Y algunas marcas comerciales también emplean grasas hidrogenadas “trans”. Este cóctel de ingredientes lo convierte en un alimento menos saludable.
Para poder conocer toda esta información, será importante leer el etiquetado del producto y fijarnos, principalmente, en los ingredientes, para saber qué tipo de grasas han utilizado y si han añadido más azúcares.
Información nutricional de los fartons
Teniendo en cuenta los fartons Polo tradicionales y los hojaldrados, la información nutricional por 100g es (cada farton son 20g):
Fartons polo tradicionales | Fartons polo hojaldrados | |
Valor energético | 373.7 kcal | 460.5 kcal |
Grasas De las cuales saturadas | 10.7 g 1.2 g | 25.2 g 11.4 g |
Hidratos de carbono De los cuales azúcares | 61.8 g 19.1 g | 51.7 g 20.8 g |
Proteínas | 8.2 g | 6.7 g |
Sal | 0.55 g | 0.54 g |
Se puede observar, por tanto, la diferencia de la cantidad de grasas saturadas, debido a la presencia de grasa de palma y manteca de cerdo en los fartons hojaldrados
Consejos para reducir el consumo de bollería o comer de forma ocasional
Por todas las características nutricionales que hemos dicho, se trata de un alimento calórico, por los azúcares añadidos y grasas saturadas, en el caso de los fartons hojaldrados.
Desde Nuttralia, aconsejamos un consumo ocasional, valorando el tipo de hambre que tenemos y el motivo de su consumo.
Eso quiere decir, que no se convierta en un alimento que esté en nuestras despensas desde que comienza el verano hasta que acaba, sino que lo disfrutemos fuera de casa y en momentos especiales, con amigos/as y/o familiares.
Todo ello para evitar aportar un exceso de calorías proveniente de nutrientes que no son interesantes, sobre todo en personas con exceso de peso o con diabetes mellitus.